sábado, diciembre 08, 2007

Sobre el descubrimiento del supuesto Primitivo Santuario con fundamentos, sin ligereza y con delicadeza. Por Néstor Morente.

En primer lugar, aclarar el trabajo que vengo realizando consta ya de cinco años. Estoy investigando sobre la historia de la Virgen de la Cueva Santa, Patrona de la Diócesis de Segorbe-Castellón y también Patrona de los Centros de Espeleologia de España. Investigación que como máxima labor, tiene el enriquecimiento histórico de lo que es nuestra Patrona diocesana. Labor muy costosa y laboriosa pero que merece la pena, pues recorres infinidad de pueblos de España que veneran a la Patrona de tu Diócesis y que tenemos tan cerca y que a tanta distancia como en América también se venera.

En segundo lugar explicar como se inició el último estudio que se ha realizado en el Santuario de la Cueva Santa. Uno de los proyectos que se incluían en mi investigación era el poder investigar en las entrañas del Santuario, ilusión desde el comienzo de mi investigación, de hecho con anterioridad, con el grupo de Espeleologia "La Senyera", ya me había puesto en contacto con bastante anterioridad, con el grupo de Espeleologia "Segorbino", con varios de sus miembros e incluso con la ilusión de pedir la correspondiente autorización al propietario legal del Santuario de la Cueva Santa, que es la Santa Iglesia Católica, pero dada la inquietud histórica que corre entre Segorbe y Altura sin fundamentos, se fue quedando en el olvido. Poniéndome por mera casualidad con el grupo de Espeleologia "La Senyera", que estaban haciendo prácticas en el Pabellón Multiusos de la Ciudad de Segorbe. Pensando que al tratarse de un grupo valenciano no se pondría ningún impedimento por parte de ciertas asociaciones.

En tercer lugar quiero dejar bien claro, como nace mi investigación. En el año 2003, yo desde siempre he tenido y tengo gran devoción a la Virgen de la Cueva Santa al igual que mi pueblo desde que un pastor segorbino hallara la Santa Imagen según cuenta la tradición.

Y siempre he tenido la curiosidad de saber al completo la historia de la Cueva Santa, entonces al ver las condiciones del mismo y la escasa información que el Santuario ofrece sobre su historia, pues ni siquiera dispone de un díptico informativo, decidí investigar por mi cuenta y tener la máxima información posible acerca de la Virgen de la Cueva Santa.

En cuarto lugar quiero comentar las condiciones que presentaba el grupo "La Senyera" cuando me puse en contacto con ellos. Les encantó la idea que les propuse de explorar la Cueva Santa. Les informé que era el V Centenario de la "aparición" de la Virgen de la Cueva Santa, desconociendo los mismos dicho acontecimiento en honor a su Patrona.

Interesados en mi proyecto, se pusieron en contacto conmigo, reuniéndonos durante varios domingos en el Casino de la Ciudad de Segorbe y dando a luz a la vez que fraguando el proyecto que se presentó a la autoridad eclesiástica, en representación con Juan Manuel Gallent, capellán del Santuario de la Cueva Santa.

En quinto lugar quiero exponer a la sociedad, el descubrimiento que personalmente he contemplado junto al grupo de Espeleologia "La Senyera". Antes de penetrar en la Cueva, yo personalmente les comenté a los espeleólogos y no científicos de la historia de la Cueva Santa. Entre la misma información les di a conocer la primera obra escrita en la historia de la Cueva Santa por José de la Justicia en 1664, el cual en su obra plantea una serie de dudas alrededor del verdadero artífice de la talla de la Virgen y de la fecha exacta de su hallazgo.

Personalmente en todo momento he tenido he tenido la esperanza de encontrar algún tipo de prueba alrededor de la misma se pudieran zanjar estas cuestiones. Encontrando esta galería que puede cambiar la historia y zanjar estas cuestiones De la Justicia después de tantos siglos. Por lo tanto es importante que las autoridades eclesiásticas permitan a especialistas e historiadores en el tema, al margen de una afición espeleológica, que investiguen y den una conclusión que podamos conocer, como dice el capellán Juan Manuel, tantos pueblos que veneran a la Virgen de la Cueva Santa.

En sexto lugar dar a conocer lo que se ha descubierto. En uno de los días que se estaba explorando la sima, nos encontramos en una galería lateral de difícil acceso, una galería no muy grande, con miles de grabados en la roca de la Cueva Santa, en su mayoría cruces, símbolo cristiano de una veneración cristiana, importante hallazgo al parecer lo que probablemente sea el documento gráfico más antiguo de la historia de la Cueva Santa, una inscripción en latín que pone "Sancta Deus Misererenobis" traducida al castellano como "Santa Trinidad único Dios, apiádate de nosotros", la cual pertenece a una de las Letanías Lauretanas de antiquísima tradición cristiana. Esta inscripción acompañada de la fecha de 1516, la cual probablemente y que con un estudio que deben realizar expertos al margen de una afición, nos podría dar, probablemente la fecha exacta del hallazgo de la Imagen.

Otro hallazgo importante en esta galería es una fecha pintada en carbón de 1676 acompañada de un anagrama pintado en carbón que se puede atribuir a la Compañía de Jesús, pero aún está por descifrar.

Por lo tanto, como investigador de la Cueva Santa quiero dejar bien claro que este hallazgo puede ser el acontecimiento más importante que ha tenido la Cueva Santa en siglos y que debe ser estudiado por gente muy especializada para poder conocer con certeza lo que se encuentra en esta galería.

Y por último quiero dejar bien claro que seguiré en curso mi trabajo para engrandecer la tan rica historia de la Virgen de la Cueva Santa, y que por tanto nos enriquece a todos y que en un futuro abriré una investigación científica para poder aclarar estos hallazgos, por supuesto como es correcto mi labor y trabajo de la Cueva Santa a la Iglesia Católica.

Quiero finalizar agradeciendo al grupo de espeleologia "La Senyera", por haberme ayudado hasta ahora en mi trabajo, al igual que a la autoridad eclesiástica, sin la cual, no hubieramos descubierto esta maravilla de la naturales y de la religión.


Néstor Morente

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