jueves, octubre 11, 2007

El PP frena el expansionismo catalanista sobre Valencia

Los separatistas catalanes pretenden no sólo la secesión de Cataluña de España, sino la creación de un delirio imperialista que denominan Paisos Catalans, que abarcaría Baleares, Valencia, parte de Aragón y el Rosellón francés. Acció Cultural del País Valencia, es uno de esos instrumentos al servicio del independentismo catalán, que recibe subvenciones periódicas de la Generalidad Catalana. La última de 150.000 euros para objetivos tan extravagantes como “el homenaje a los muertos y las ciudades represaliadas por la Guerra de Sucesión” o la difusión y promoción de la lengua y la cultura catalanas en Valencia.

Acció Cultural del País Valencia mantenía varios repetidores en Valencia para reproducir las emisiones de TV3, que pese a varios requerimientos legales ha mantenido hasta que el Gobierno valenciano presidido por el PP impuso a esta organización una sanción de 300.000 euros ( al menos parte del dinero de nuestros impuestos que tira la Generalidad catalana volverá al erario público) y el clausura de los repetidores para terminar con las emisiones ilegales de TV autonómica catalana en la Comunidad Valenciana.

Diferentes colectivos de ultraizquierda han salido en defensa de la organización independentista, así CCOO de Valencia ha difundido un ilustrativo comunicado que dice:
“pensamos que no solamente perdemos la opción de ver un canal de televisión sino que, además, perdemos una poderosa herramienta de difusión de la lengua propia y la posibilidad de fomentar la creación de un estándar comunicativo entre Baleares, Cataluña, País Valenciano y Aragón empleando la reciprocidad en las emisiones televisivas”.

Recordemos que en recientes fechas TV3 y Catalunya Ràdio vetaron a los colaboradores que hablen en español, como la uruguaya Peri Rossi, que ha sido despedida del espacio radiofónico donde colaboraba. Además los reportajes o documentales deben incorporar una voz ‘en off’ en lengua catalana. En las entrevistas, el castellano no se puede utilizar como lengua ‘puente’ y, por último, los anuncios gratuitos siempre deben emitirse en catalán, nunca en otro idioma.

Curiosamente según ACPV, la resolución del Gobierno valenciano significa
“una conculcación de los más elementales derechos democráticos, un ataque a libertad de expresión y a la pluralidad informativa y una agresión a la lengua”.

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