sábado, junio 23, 2007

El obispo anima a desacatar la ley y vetar la implantación de Educación para la Ciudadanía

El obispo de la diócesis de Segorbe-Castelló, Casimiro López Llorente, se sumó ayer a la campaña activa diseñada por la cúpula de la Iglesia contra la implantación de Educación para la Ciudadanía. La Conferencia Episcopal divulgó hace unos días un documento en el que toma posición frente a la formación en valores éticos y sociales de la nueva asignatura, concebida por el Gobierno socialista como una alternativa a la enseñanza de la Religión.


López Llorente recriminó al Ejecutivo que «plantee la educación moral desde una perspectiva agnóstica, relativista y desde la ideología de género» . A su modo de ver, la asignatura pone en cuestión la libertad de conciencia y de enseñanza. En declaraciones a la cadena COPE , el prelado cuestionó las formas con que el Gobierno pretende imponer la asignatura, que en la Comunitat Valenciana se implantará el curso 2008/2009. De hecho, las principales trabas del obispo vinieron del carácter obligatorio de la asignatura.

Para afrontar una imposición que cree atentatoria a la libertad religiosa, López arengó a la feligresía católica a cuestionar la asignatura con los «planteamientos democráticos que el sistema ofrece» . Con este eufemismo, se refería a la objeción de conciencia, esto es, al supuesto derecho a aplicar una moral individual para eludir las obligaciones de la ley. Sin desdeñar la vía de la Justicia: «Dejemos a los tribunales que decidan, pero no amenacemos» , afirmó. Y agregó: «El Tribunal Constitucional deberá dilucidar» .

La Iglesia cree que los contenidos de Educación para la Ciudadanía entrarán en colisión con la doctrina religiosa. La asignatura pretende potenciar el conocimiento de valores democráticos, el papel de los hombres y las mujeres en la sociedad, y los matrimonios y las familias. Siempre desde la base de los derechos humanos y desde puntos de vista cercanos a la realidad sociológica existente, que resulta poco del gusto de los jerarcas de la Iglesia. Un ejemplo palmario es el de la homosexualidad. Mientras la asignatura la engloba en un ámbito de normalidad, como fruto de la libertad sexual del individuo, desde la Iglesia se cree que lo que se está haciendo es naturalizar un comportamiento que la religión considera, contrariamente a ello, antinatural.

El obispo de Segorbe-Castelló llama a los padres y madres de la diócesis a hacer frente al modelo laico de educación en valores. López Llorente advertía ayer de que el conflicto principal se dará en los colegio privados de confesión católica, en los que la fe en Dios debe primar sobre la moral de Estado. Los prelados españoles han llamado a cerrar filas a los colegios católicos y advierten que si admiten en su programación los contenidos previstos en los reales decretos para esta asignatura, «entraran en contradicción con su carácter propio» .

«La autoridad fiscal no hace nada contra el anticlericalismo»

Casimiro López Llorente cumple hoy un año de pastoreo de almas en la diócesis de Segorbe-Castelló. Desde aquel 23 de junio de 2006 en que tomó posesión del cargo en la catedral segorbina hasta hoy, el religioso castellano se ha enfrascado en la tarea silenciosa de recomponer los mimbres deslavazados por su antecesor en el cargo, Juan Antonio Reig Pla. Ha sido un año «rápido», aunque las decisiones en el gobierno diocesano se hayan hecho esperar. Pero un tiempo que, sin embargo, le ha servido para atestiguar las dificultades a las que se enfrenta la Iglesia en las convulsiones del siglo XXI. Entre ellas, «el anticlericalismo, fruto del ambiente laicista» que acarrea «agresividad, menosprecio y hostigamiento». Hasta en los centros escolares, dice. López Llorente reclama más respeto para los católicos españoles, porque «la autoridad fiscal no hace nada», se lamenta.


Fuente: Levante de Castellón

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